Cuando se encontraba disfrutando de una jornada tranquila y distendida, con asado, juegos y  festejo incluido por el cumpleaños de Fernando Muslera, la delegación uruguaya recibió una amonestación de FIFA despues del debut con victoria 1-0 sobre Egipto.

En un  principio se pensó en algún tipo de investigación por una actitud de Luis Suárez, que despues del gol parece darle un golpe en el brazo a un rival. Sin embargo, no fue así, ya que dependiendo de la toma Suárez parece  hacer un gesto para alentar a otros jugadores a que se sumen al festejo.

La razón fue que el banco de suplentes, incluidos los futbolistas que habían sido sustituidos, invadieron el campo de juego para celebrar el gol de José María Giménez a los 89 minutos.

Por ahora solo quedó en una advertencia, pero si se da un hecho similar habrá una sanción económica.