El gobierno de Sebastián Piñera presentó 227 querellas contra 997 imputados por los actos de violencia durante las protestas sociales que sacuden a Chile desde el 18 de octubre. Mientras, en Santiago y el resto del país continúan las manifestaciones. Hoy llegaron hasta Plaza Italia las educadoras de párvulos en rechazo al proyecto del Ejecutivo de Sala Universal por no estar centrado en los niños de 2 a 6 años. También hasta el Ministerio de Salud se trasladaron médicos, enfermeras y trabajadores del área en protesta por el presupuesto que aumenta sólo en 0,28 dólares el financiamiento de la atención primaria. Reclaman que se destine el 6% del PIB a salud. El subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, informó hoy en La Moneda que el gobierno presentó "228 querellas" por los actos de violencia durante las protestas sociales y que tienen "997 imputados, personas con nombre y apellido, eso significa que estamos mejorando la puntería".

En rueda de prensa conjunta con la nueva ministra portavoz de La Moneda, Karla Rubilar, la autoridad sostuvo que "estas detenciones tienen que ser declaradas legales", y que ese es el objetivo encargados a las policías para que las pruebas sean suficientes. Ubilla precisó que hay grupos violentos y que "Carabineros va a seguir presente en cada barrio en cada ciudad", con la colaboración de la policía civil de Investigaciones. Rubilar recalcó que las querellas "ya no son contra quienes resulten responsables, sino contra individuos determinados, los estamos identificando, los estamos deteniendo". La vocera lamentó que "lo que había venido disminuyendo en materia de violencia habría recrudecido el día de ayer". Mientras el general director de Carabineros, Mario Rozas, rindió homenaje a la fuerza pública porque "trabajan 16 horas diarias" e hizo un controvertido llamado "a mis compatriotas, a nuestros vecinos que denuncien a los vándalos", agregando que "estamos actuando, por eso que necesitamos la cooperación de la comunidad".

Rozas se reunió con el nuevo ministro del Interior, Gonzalo Blumel, y contó que su superior lo instó a "seguir actuando de la mejor forma posible". "La gran mayoría de los procedimientos están adoptados en forma legal, no hay ningún reproche", aseguró el jefe policial aunque confirmó que hay 14 sumarios administrativos en curso. Comprometió que las denuncias de excesos policiales se deben indagar y, si se amerita, poner a disposición de la Justicia, pero insistió que la mayoría de sus procedimientos están de acuerdo a los protocolos establecidos. Descartó estar "sobrepasados" y dijo que "hemos tenido cerca de 2 mil eventos y 3 mil y tantos detenidos todos bien adoptados los procedimientos". Desde el Ministerio de Justicia se confirmó que 20 personas han muerto dentro de las manifestaciones de los últimos 10 días y que 9.203 fueron detenidas, 2.037 durante los toques de queda.

En tanto, el nuevo ministro de la Presidencia, exdiputado y ex titular de Bienes Nacionales, Felipe Ward, aseguró que ya pidió disculpas a la actual diputada comunista Camila Vallejo por sus dichos de hace 11 años donde dijo que era "sólo una cara bonita" cuando lideraba las manifestaciones estudiantiles de 2011, en el primer gobierno de Piñera (2010-2014). A Ward también le recordaron a través de redes sociales su expresión de que 'los Derechos Humanos son una especie de cajero automático que usa la izquierda para sacar plata'. "Son palabras inadecuadas, yo creo que corresponde decir que sí. Son palabras inadecuadas, creo que hay que sintonizar con lo que está ocurriendo, yo creo que uno en política a veces recibe críticas injustas y esta es una crítica justa" asegurando que hoy "no reflejan mi pensamiento en un tema tan importante y tan sensible".