LONDRES (Uypress) – La pandemia de coronavirus ha provocado cambios en el ranking de costo de vida en ciudades que elabora la Economist Intelligence Unit, y este año dos europeas y una asiática ocupan el "podio" de las más caras.

El año pasado eran Singapur, Osaka y Hong-Kong las que ocupaban los tres primeros lugares, pero 2020 y la covid-19 produjeron movimientos y cambios en el ranking que todos los años elabora la Economist Intelligence Unit (EIU) del periódico The Economist.

Las tres ciudades más caras del mundo son ahora dos europeas, Zúrich y París, junto con Hong Kong, según un nuevo informe sobre el costo de vida.

La encuesta anual realizada por The Economist Intelligence Unit reveló que los precios de Singapur descendieron y atribuye las causas al éxodo de trabajadores extranjeros que se desencadenó con la crisis sanitaria del coronavirus.

El índice de este año está elaborado en base al costo a setiembre de 138 bienes y servicios en alrededor de 130 ciudades, y tuvo un incremento promedio total de 0,3 puntos respecto al año anterior.

El índice, denominado como Unit's Wolrdwide Cost of Living (UWCOL) toma como valor 100 el de la ciudad de Nueva York. Las tres ciudades definidas como las más caras alcanzaron un índice de 103. Completan la lista de las 10 ciudades más caras Singapur (102), Tel Aviv (101), Osaka (101), Ginebra (100), Nueva York (100), Copenhague (96) y Los Ángeles (96).

El informe de The Economist está dirigido fundamentalmente a ejecutivos que viven fuera de sus países de origen y usa los datos utilizados por las multinacionales para ayudarles a calcular el costo de los viajes de negocios y los paquetes para expatriados.

Las ciudades de América, África y Europa del Este se han vuelto más baratas desde el año pasado, mientras que las ciudades de Europa Occidental se han vuelto más costosas.

De las diez categorías cubiertas por el informe, el tabaco y la recreación registraron los mayores aumentos de precios, mientras que los precios de la ropa registraron la caída más pronunciada.

De acuerdo al informe, el costo en ciudades de América, África y Europa del este se ha abaratado, en tanto que las urbes de Europa occidental se ha encarecido, lo que reflejaría parcialmente un incremento de la fortaleza de las monedas europeas frente al dólar.