BUENOS AIRES (Uypress) - El novel gobierno de Alberto Fernández anunció su intención de poner en práctica un impuesto a los viajeros y las compras en el exterior, lo que generará un impacto negativo en la temporada turística de nuestro país. Las luces de alerta ya estaban encendidas y desde el sector turístico se esperaba que esta temporada fuera a dejar que desear. Los elementos negativos parecen ir confirmándose. El nuevo Gobierno de la República Argentina, encabezado por Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, anunció a través de su jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, el envío al Congreso de un proyecto de ley denominado de "solidaridad y reactivación productiva" que incluye la adopción de un impuesto que será de 30% a los consumos en dólares, entre otras cosas. De esta manera, al adía de hoy, el dólar turista costaría $ 81,90.

Esa medida ocasionará un encarecimiento significativo de los consumos de los argentinos en el exterior Cafiero explicó que con la medida se busca "cuidar los dólares que tiene la economía argentina y reactivar la industria turística local. Persigue una lógica distributiva. Los sectores que tienen la capacidad de hacer un viaje al exterior van a tener un tributo". La reinstalación de este impuesto persigue aumentar la recaudación y fomentar el turismo interno, y se aplicará a los gastos realizados en el exterior, las compras web y suscripciones como a Netflix o Amazon. Ya Macri había adelantado una medida que pegaba contra la temporada en nuestro país, que era la decisión del Banco Central de modificar el límite para comprar dólares a personas con cuentas bancarias, pasándolo de 10.000 a 200 mensuales.

"Los que se anticiparon para comprar paquetes all-inclusive son los grandes ganadores en esta situación. No solo porque tienen todo pago, sino que al anticiparse pudieron conseguir viajar en las condiciones de fecha y lugares que buscaban. Los que salen a hacerlo ahora o mañana para estar tranquilos no tienen la misma suerte que el que ya se anticipó", indicaron operadores turísticos de la vecina orilla. El "dólar turista" ya estuvo vigente desde 2012 hasta el 2015, durante el segundo gobierno de Cristina Kirchner: comenzó con un recargo del 20% y llegó finalmente al 35 por ciento. La medida, ahora, apunta a reducir el déficit de la balanza turística, que en 2018 rozó los U$S 8.000 millones y este año, aunque en baja, estaría en cerca de U$S 5.000 millones.