En 2018, más de 18 millones de personas en todo el mundo fueron diagnosticadas con cáncer, un número destinado a aumentar en un 60% en los próximas décadas, para 2040, si no hay un cambio de dirección. Así lo reveló la Organización Mundial de Salud (OMS) que, con motivo del Día Mundial de cáncer, delineó los "pasos para salvar 7 millones de vidas de tumores" y apuntarle a las "desigualdades inaceptables entre los servicios contra el cáncer en países ricos y pobres". Todos los años, solo en la región europea de la OMS se diagnostican al menos 4,6 millones de casos nuevos de cáncer y 2,1 millones de diagnosticados muere por esa enfermedad. El 20% de esas muertes provienen del cáncer de pulmón, seguido del colorrectal (12%), mama (7%), páncreas (6%) y estómago (5,7%). Entre los que contraen cáncer, el riesgo morir depende mucho del lugar en el que se vive y, en promedio, es incluido entre 9 y 12% en Europa occidental, superior al 12% en los países de Europa del Este y crece aún más en el países en desarrollo. Dos causas que disminuyen la posibilidad de sobrevivir: un diagnóstico que llega demasiado tarde y un mal tratamiento "Los últimos 50 años han visto un tremendo progreso en el investigación del cáncer"y "se han reducido las muertes", dijo Elisabete Weiderpass, directora de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (Iarc). Pero ese beneficio ha llegado, sobre todo, a los países de altos ingresos, "que han adopEn 2018, más de 18 millones de personas fueron diagnosticadas con cáncer tado programas de prevención y diagnósticos precoces", además de mejores tratamientos, lo que llevó a una reducción en un 20% de mortalidad prematura entre 2000 y 2015. Mientras que los países los bajos ingresos se vio sólo una reducción del 5%. En 2019, de hecho, según el nuevo Informe Mundial sobre el Cáncer preparado por Iarc en colaboración con la OMS, más del 90% de los países de altos ingresos disponía, en su sistema de salud público, de servicios integrales para prevenir, diagnosticar y curar tumores malignos, en comparación con el 15% de los países de bajos ingresos. Si a nivel mundial, el aumento de nuevos casos de cáncer está previsto en un 60% en dos décadas, para varios países pobre el porcentaje alcanza el 80%. Sin embargo, se puede hacer mucho para reducir estas cifras. "Al menos 7 millones de vidas podrían salvarse en la próxima década, basándose en la cobertura universal de salud y movilizando a varias partes interesadas a trabajar juntas", dijo Tedros Adhanom Ghebreyesus, director General de la OMS. Los pasos para lograr, según la sugerencia de la OMS, son desde intervenciones preventivas primarias, como reducir el consumo de tabaco (responsable 25% de muertes por cáncer), sedentarismo y obesidad. Luego, se puede contar con la ayuda de vacunas. Especialmente, la vacuna contra la hepatitis B para prevenir la cáncer de hígado y contra el HPV para la eliminación de cáncer de cuello uterino, que cada año, sólo en Europa, mata a unas 28.000 mujeres.