Estimados compatriotas, En estas horas están llegando las papeletas en las que se nos llama a expresarnos en el referéndum sobre el recorte de parlamentarios en Italia. Queremos compartir con ustedes los cinco motivos principales por los que invitamos a la ciudadanía a rechazar esta propuesta. 1) A diferencia del resto de los parlamentos europeos, el Parlamento italiano tiene dos cámaras que hacen exactamente lo mismo (esto se llama bicameralismo paritario). Para mejorar el trabajo del Parlamento y convertirlo en un moderno parlamento europeo, Italia debe superar el bicameralismo paritario. Pero esta propuesta no va en esa dirección. No es una reforma, porque no reforma nada: es un mero recorte que, lejos de ayudarnos, entorpecerá el trabajo de nuestros representantes. Los parlamentarios italianos son 945. ¿Son muchos? En el Reino Unido son 1423, en Francia, 925. Sus parlamentos trabajan ágilmente y no tienen el bicameralismo paritario. 2) Los promotores dicen que hay que recortar el costo de la política. Pero el ahorro equivale a €0.95 por año por ciudadano. ¿De verdad la calidad de la representatividad vale el precio de un café al año? Nosotros creemos que no. El costo de la política no es tener más o menos parlamentarios – con esa lógica, cerrando el Parlamento ahorraríamos más dinero. El costo de la política se reduciría teniendo parlamentarios y representantes competentes, que creen las condiciones para que haya crecimiento, empleo, seguridad y bienestar, no recortando parlamentarios, no recortando la democracia. En otras palabras, este recorte es una reducción, una agresión al Parlamento. 3) El mensaje que los promotores del recorte están enviando es un mensaje de anti-política, de castigo a la casta. Para nosotros, la política es una cosa hermosa, que requiere de la fuerza de los jóvenes y la experiencia de los grandes, es lo que los ciudadanos italianos, tanto en Italia como en el mundo, tenemos en común. Castigar a la política es dispararse en los pies. En lugar de dar el ejemplo equivocado con el recorte, es necesario que en las instituciones coloquemos a los mejores. El resentimiento de buscar castigar a nuestros representantes no tardaría en volvérsenos en contra. Además, el recorte no garantiza un mejor Parlamento. Nuestro interés es tener mejores instituciones, no vapulearlas. 4) Con el recorte, los italianos en el exterior estaríamos especialmente penalizados, porque verían mucha más reducida su representación, respecto de los residentes en Italia. Los diputados pasarían de 12 a 8, y los senadores, de 6 a 4. Considerando que solo en Sudamérica hay más de un millón de ciudadanos italianos, sería imposible para un representante tener contacto con los electores de su territorio, y de esta manera, sería muy difícil responder a sus necesidades. Y también para los residentes en Italia, el recorte produciría un notorio alejamiento entre los parlamentarios y la ciudadanía del territorio. 5) La reducción de parlamentarios haría de Italia el país con menos diputados por habitante en toda la Unión Europea, entorpecería el trabajo de las comisiones parlamentarias, y al restringir drásticamente la pluralidad, concentraría el poder en las manos de pocos representantes. No debemos recortar el número de parlamentarios. Debemos recortar la incompetencia. Se trata de mejorar nuestras instituciones, no de destruir nuestra propia representatividad.

Votá NO en el referéndum sobre el recorte de parlamentarios.

NICOLÁS FUSTER, GAIA MARCHIORI ITALIA VIVA SUD AMERICA

por OSCAR ESCAMILLA