A poco más de dos semanas de las elecciones presidenciales de 2020, unos 22 millones de estadounidenses ya emitieron sus votos, y los demócratas se han adelantado por un amplio margen, de acuerdos a datos oficiales, lo que está generando crispación en el equipo de campaña de Donald Trump. Los demócratas han superado en número a los republicanos en las urnas hasta ahora por un margen de dos a uno. Las papeletas emitidas hasta ahora representan el 16% de todas las realizadas en la carrera presidencial de 2016, según una revisión publicada hoy por The New York Post. Los expertos predicen que las elecciones de 2020 pueden tener hasta 150 millones de votos emitidos, lo que la convierte en la elección con mayor participación desde 1908 en la historia de Estados Unidos. Los analistas señalan además que las cifras actuales de la votación anticipada pueden dar a los demócratas una ventaja anticipada de cara al día de la votación final, el 3 de noviembre. El Partido Demócrata también está viendo buenas noticias de las boletas electorales ausentes tempranas. Más del 75% de las 437.000 papeletas enviadas por correo en Pensilvania han sido de demócratas. "Todo esto es alentador, pero tres semanas es toda una vida", afirmó el estratega de datos demócrata Tom Bonier. "Los demócratas han puesto un par de puntos en el tablero, acotó". Mientras tanto, y durante aproximadamente 24 horas, en Carolina del Norte un tribunal federal aprobó un acuerdo entre funcionarios estatales y defensores del derecho al voto que, en última instancia, permitirá que se contabilicen más papeletas en el campo de batalla presidencial, poniendo fin a meses de litigio sobre el uso ampliado de la votación por correo durante la pandemia del coronavirus. Al día siguiente, un tribunal estatal exigió nuevos cambios, y no se descartan más apelaciones, a pesar de que faltan poco más de dos semanas para el 3 de noviembre. Carolina del Norte no es el único estado donde los votantes están experimentando un latigazo cervical relacionado con las elecciones. En Texas, donde comenzó la votación anticipada, un tribunal federal a última hora de la noche del lunes revocó un fallo de un tribunal que detuvo el límite de urnas de entrega de boletas. Las demandas de votación han alcanzado un máximo histórico en 2020, abarcando todo, desde fechas límite de recepción de boletas y demoras postales hasta procesos para corregir errores en las boletas. Los republicanos, respaldados por el esfuerzo de reelección del presidente Donald Trump, han tratado de mantener estricto el proceso de votación por correo, mientras que los demócratas y la campaña de Joe Biden han luchado para relajar las reglas que dicen que son innecesarias o peligrosas en una pandemia.