Cuando parecía que Estados Unidos estaba más cerca de volver a normalidad y al estado prepandemia, el resurgimiento de casos de coronavirus amenaza con derrumbar la recuperación económica y cambiar los planes de regresar al trabajo.

​ ​ ​ A esto se suma que la amplia red de seguridad social que el Congreso construyó durante la pandemia está llegando a su fin.

​ ​ ​ El vencimiento inminente de los beneficios por desempleo, la prohibición de los desalojos y otros programas de rescate, está generando preocupación en la Casa Blanca y entre economistas, quienes advierten que la recuperación podría desmoronarse en las próximas semanas.

​ ​ ​ Los principales jugadores políticos de Estados Unidos aseguran que, si bien es poco probable que se produzcan cierres comerciales generalizados, los temores renovados del virus por sí solo puede ralentizar la economía.

​ ​ ​ Ese temor podría frenar la contratación y mantener a algunos trabajadores al margen del mercado laboral, paralizando o incluso revirtiendo la recuperación laboral, la pieza central de la agenda económica del presidente Joe Biden.

​ ​ ​ Los nuevos reclamos por desempleo subieron la semana pasada a 419.000, muy por encima de las expectativas y el más alto desde mediados de mayo, informó esta semana el Departamento de Trabajo.

​ ​ ​ Biden, cuyo índice de aprobación de Gallup cayó al 50% esta semana, su nivel más bajo hasta ahora, ya está provocando ataques de parte de legisladores republicanos, que buscan recuperarse en las elecciones legislativas de 2022.

​ ​ ​ El representante Kevin Brady de Texas, el principal redactor de impuestos del Partido Republicano en el Congreso, dijo que Biden se ha concentrado demasiado en los planes de ayuda monetaria y no lo suficiente en el virus.

​ ​ ​ Jason Furman, un ex asesor económico del presidente Barack Obama y cercano al actual equipo económico de la Casa Blanca, señaló que el ala oeste está muy consciente de los riesgos para la economía derivados del aumento en los casos de Covid-19.

​ ​ ​ "Cualquier problema que tenga entre un 5% y un 10% de probabilidades de descarrilar la recuperación económica lo están mirando muy de cerca y les preocupa", dijo Furman.

​ ​ ​ Otra persona familiarizada con las discusiones del equipo económico confirmó que la Casa Blanca está prestando mucha atención, pero no considera que el virus sea una amenaza significativa.

​ ​ ​ Ante el aumento de casos, Biden sigue pidiendo a los estadounidenses que se vacunen, tanto por la salud personal como por el posible impacto en la economía.

​ ​ ​ Los casos de coronavirus han aumentado en todo el país y han vuelto a su nivel más alto desde principios de mayo a medida que la variante altamente contagiosa se propaga por todo el país.

​ ​ ​ "Si la gente no se siente segura, cerrará las escuelas. Si la gente no se siente segura, no volverá a trabajar", dijo Claudia Sahm, ex economista de la Reserva Federal.

​ ​ ​ "La recuperación, está en marcha, pero aún es vulnerable", acotó.​