DI STEFANO CASINI

Cuando vemos las estadísticas de los suicidios en las últimas décadas, nos viene un nudo a la garganta. Recuerdo un amigo que, hace meses, me decía : “El Covid 19 es una pandemia terrible, pero se vuelve humana cuando se muere un amigo, un pariente o simplemente un conocido o un vecino”.  Lamentablemente esto ocurre también con los suicidios. Más de 700 en un año como en Uruguay es una cifra que asusta. En realidad son más de 800 mil las personas que se suicidan cada año, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), a pesar que, en 2020, el número fue de casi 1 millón. Es decir que cada menos de 40 segundos una persona muere por esa causa. “Sin embargo, como el suicidio es un asunto delicado, incluso ilegal en algunos países, muy probablemente exista subnotificación”, advierte el organismo internacional. Lo más grave es que, en los últimos 45 años, las tasas de suicidio aumentaron en un 60% a nivel mundial. Según la OMS, Guyana, Corea del Sur y Sri Lanka son los países con los porcentajes más altos en suicidios cada 100 mil habitantes, con tasas de 44,2, 28,9 y 28,8, respectivamente. Por su parte, los países con menor tasa de suicidio son Siria (0,4), Arabia Saudita (0,4), y Líbano (0,9).

¿Que ocurre en Uruguay? Lo que más impacta es que el crecimiento de suicidios fue terrible en las personas más jóvenes, los adolescentes. Un 45% más en las últimas 3 décadas es mucho. La pandemia ayudó mucho a nivel mundial, ya que, en 2020 y lo que va del 2021, según datos extraoficiales, los suicidios aumentaron casi en un 20%. Es bastante lógico si lo analizamos desde un punto de vista social. Sobre todo entre los adolescentes. Que horrible que un muchacho de 18 años no pueda verse con amigos, no pueda ir a bailar los fines de semana, no pueda tomar cervezas con los compinches, hasta no pueda tener relaciones sexuales, porque hay que quedarse en casa!!! Hay países en los cuales el aumento de suicidios es realmente preocupante. Por ejemplo Japón, un país que informa sobre suicidios con mayor rapidez y precisión que cualquier otro país del mundo ya que, a diferencia de la mayoría de los países, se recopilan las cifras al final de cada mes. Durante la pandemia de covid-19 los números han contado una historia inquietante. En 2020, las tasas de suicidio en Japón subieron por primera vez en 11 años. Lo más sorprendente es que, mientras los suicidios masculinos descendieron ligeramente, las tasas entre las mujeres se dispararon casi un 15%. Solo en octubre, la tasa de suicidios femeninos en el país dio un salto de más del 70%, en comparación con el mismo mes del año anterior

Si miramos el mapa mundial son sorprendentes las proporciones: por ejemplo USA tiene el doble de suicidios cada 100.000 habitantes que España (USA 14,50 España 7,76), sin embargo Uruguay tiene números mucho más elevados totalizando 33 hombres cada 100.000 habitantes a los que le tenemos que sumar casi 9 mujeres! En un lugar tan martirizado por la guerra como Israel hay 5,5 cada 100.000 y en las Bahamas no llegamos a 2. Estamos mal por acá, deberíamos hacer algo, legislar, ocuparnos más de esta pandemia que se lleva, sobre todo, nuestra juventud. Es apenas un llamado a la reflexión.

STEFANO CASINI