La FIFA insiste con la idea de celebrar Mundiales cada dos años a partir del 2026 y según el francés Arsene Wenger, director de desarrollo de la entidad, descomprimiría el renovado conflicto entre las selecciones y los clubes.
    En diálogo con el diario "L'Equipe", el ex entrenador del Arsenal reiteró su postura en favor de una reforma global de los calendarios del fútbol.
"La idea es reagrupar los partidos de las selecciones nacionales en uno o dos períodos al año, de forma que los jugadores no tengan que ser cedidos tantas veces por los clubes", explicó.
"De ese modo, al final de la temporada podría disputarse un torneo de enorme relevancia como un Mundial u otro", completó al aludir a una cuestión que volvió a ser tema de debate tras las fechas eliminatorias que se disputan entre esta y la próxima semana.
La decisión de la Conmebol de disputar tres jornadas en ese lapso para recuperar partidos que no pudieron jugarse en su momento por la pandemia generó más de un entredicho con los clubes europeos.
En especial los de la Premier League, que apelando a la obligación de efectuar una cuarentena de diez días para aquellos que regresan al Reino Unido después de jugar con sus selecciones en países considerados de riesgo sanitario, se negaron a ceder a sus jugadores.
A esa postura se sumaron también los clubes de la Liga Española, la Liga Portuguesa y la Serie A, en tanto que la Ligue 1 dijo estar de acuerdo, pero no habilitó a sus clubes a incumplir con el pedido de la FIFA y con el reglamento.
No todos los clubes lograron imponer su deseo pues varios futbolistas desoyeron su pedido y concurrieron de todos modos a los partidos de sus selecciones, algunos de ellos amparados al rechazo del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) a un recurso de la Liga Española.
"Habría que separar mejor las actividades y compromisos de los clubes de los de las selecciones nacionales", terció hoy Wenger, según el cual su iniciativa "se traduciría en menos viajes intercontinentales para los futbolistas".
"La idea es apelar a una única ventana internacional, quizás a lo largo de todo el mes de octubre, o tal vez a dos, en octubre y en marzo, para ls eliminatorias", consideró.
"Esto permitiría que los clubes tuviesen a disposición a sus jugadores durante siete meses ininterrumpidos y sin necesidad de aumentar la cantidad de partidos y garantizaría un período de descanso al final de la temporada de 25 días asegurados para los futbolistas", agregó.
"El público quiere competencias que sean fáciles también de comprender y nosotros tenemos que movernos en ese sentido", completó el ex DT de los "Gunners".
"Se trata de un proyecto global que involucra también al fútbol femenino", destacó al explicar que "en cualquier caso, jugar cada dos años un Mundial no le quitaría expectativas, ni prestigio porque, si así fuese, deberíamos jugarlo cada diez años", graficó.
"Debemos tener el coraje de decir que la belleza y el prestigio de esta competencia dependen de su propia calidad", agregó antes de preguntar: "¿Quieren un ejemplo?: La Super League (europea) tenía el peor defecto posible porque no se basaba en la calidad deportiva, sino sólo en el prestigio de los clubes involucrados y, por ende, tampoco en los resultados".
Wenger no dejó pasar la oportunidad para criticar por elevación a Real Madrid, Barcelona y Juventus, los únicos tres clubes que persisten en su idea de parir esa Super League, de la que desertaron en cambio nueve de sus "socios fundadores".
El proyecto del ex entrenador francés relativo a la Copa del Mundo se podría llegar a implementar en 2026, cuando compartirán la organización Estados Unidos, México y Canadá.
Lo que no aclaró Wenger, al menos en esta entrevista, es cómo sería el calendario del nuevo Mundial de Clubes con 24 equipos que la FIFA pretende organizar, pero sin haber establecido aún a partir de cuando.