La Comisión de Constitución del Senado aprobó en general por 3 votos contra 2 el proyecto del cuarto retiro del 10% del sistema privado de fondos previsionales de Chile. El senador del oficialista partido Renovación Nacional, Rodrigo Galilea, que votó en contra, subrayó que la iniciativa "no va a beneficiar en nada a los miles de chilenos que no tienen un solo peso, tras los anteriores retiros". Se estima que cerca de 3 millones de cuentas de capitalización individual ya no tienen fondos. Asimismo, el parlamentario sostuvo que girar desde la modalidad de jubilación de rentas vitalicias a través de una aseguradora "no es una expropiación ni auto préstamo, es una confiscación".

Las aseguradoras han ejercido una intensa presión para evitar, en su caso, un segundo retiro, señalando que de concretarse será la quiebra de muchas de ellas y no podrán seguir entregando las jubilaciones a los cerca de 700.000 jubilados bajo esta modalidad. Galilea repitió los argumentos de los economistas y del Gobierno sobre las presiones inflacionarias del extranjero, las que calificó como "complejas" y llamó a escuchar al Banco Central que, según él, son los expertos en la materia.

Le respondió su par de oposición, el socialista Alfonso de Urresti, quien apuntó al gobierno por no saber "ayudar a millones de familias". Reconoció que "no es la mejor política pública, nos estamos comiendo los ahorros del futuro", pero la situación obliga a aprobar el proyecto, defendió, exhortando al próximo Presidente de la República a implementar un sistema previsional a la altura.

Francisco Huenchumilla, representante del también opositor partido Demócrata Cristiano, fustigó a los economistas que desde un primer momento rechazaron los retiros anunciando una verdadera catástrofe sobre el país. "Predicaron una cosa, que al momento de los quiubo no se dio" y añadió que "nos equivocamos al ser tan restrictivos de las políticas fiscales". Argumentó que "estamos en esto porque fue un proyecto fallido (las AFP), una promesa incumplida" (mejores pensiones), y comparó el sistema de pensiones de las Fuerzas Armadas (de reparto), que "ellos defienden", porque funciona, aseguró.

El presidente de la Comisión, el independiente de oposición Pedro Araya, manifestó entender las presiones de los expertos y los operadores políticos. Coincidió con Huenchumilla al indicar que "si hubiésemos tenido un régimen de protección social no estaríamos viendo esta situación que quedó al descubierto con la pandemia".

El proyecto del cuarto retiro, ya aprobado por la Cámara Baja, consiente retirar un monto máximo de fondos equivalentes a 5.555 dólares. Si el afiliado tiene en su cuenta individual menos de 1.296 dólares, puede retirar todo. En el caso de las rentas vitalicias, permite adelantar el pago de hasta el 10% de los fondos que fueron traspasados a las compañías de seguros, con el mismo tipo de las administradoras. En el caso de quienes hayan sido diagnosticados con enfermedades graves, catastróficas o de alto costo, autoriza el retiro del 100% de los fondos.

El proyecto dejó en claro que los altos funcionarios de la administración pública no pueden hacer retiros, luego que se filtrara que ministros y subsecretarios del Gobierno habían hecho el primer giro, el año pasado.

Los fondos retirados se consideran extraordinariamente intangibles y no serán objeto de retenciones o descuentos, salvo en aquellos casos de deudores de pensiones alimenticias. Este último es un tema sensible, toda vez que los retiros dejaron al descubierto que el 84% de los padres separados son deudores de pensiones alimenticias. Durante los tres primeros retiros se hicieron 160 mil solicitudes y hasta el momento se han pagado 514.814 mil dólares en pensiones alimenticias.

Los afiliados podrán solicitar el retiro hasta 730 días de la publicación en el diario oficial.? La iniciativa legal propone también que quienes quieran podrán optar a un método de devolución aumentando su cotización obligatoria en un punto porcentual (11%) de sus remuneraciones por un periodo mínimo de 1 año y por el plazo que el afiliado estime conveniente.