MONTEVIDEO (Uypress) – El presidente de la República cierra el año con una aprobación a su gestión del 50%, de acuerdo a los datos de una encuesta por Equipos Consultores. Según el estudio, la desaprobación alcanza el 28%.

"Al promediar diciembre, las visiones de los uruguayos sobre el desempeño de Lacalle Pou como presidente mantienen saldo positivo. La mitad de la población (50%) aprueba su trabajo, y algo más de la cuarta parte (28%) lo desaprueba. El resto tiene opiniones intermedias, o no tiene opinión", comienza señalando el informe de Equipos Consultores presentado en Subrayado y publicado en su página web.

De esta forma, el presidente cierra el segundo año calendario de su período de gobierno, manteniendo un apoyo importante de la población, similar (apenas por encima) a la proporción de votos con la que fue electo en 2019 (48,8%), continúa el análisis.

"Mirado en el mediano plazo, los juicios de los uruguayos sobre el presidente han mostrado más estabilidad que cambio. Desde la primera medición de este ciclo de gobierno hasta la actual, la constante ha sido que las aprobaciones superan con relativa holgura a las desaprobaciones".

Más allá de lo precedente, según concluye Equipos, pueden diferenciarse al menos tres etapas con matices significativos.

"La primera etapa abarcó todo el año 2020. En este año los apoyos al presidente se mantuvieron en el eje del 60%, y las desaprobaciones rondando el 20%. Un saldo neto amplio, de 40 puntos al finalizar el año (diciembre de 2020), y razonablemente estable en todo el período".

"La segunda etapa transcurre en el primer semestre de 2021, hasta junio inclusive. Al comenzar el año se apreció una erosión en los indicadores de aprobación presidencial, asociados básicamente a una pandemia que iniciaba su fase de crecimiento, y a una vacunación que no llegaba. La incertidumbre comenzó a ganar espacio en algunos sectores de la población, y la evaluación presidencial se vio afectada. Sin embargo, la rápida llegada de las vacunas le permitió al presidente recuperar buena parte del terreno perdido. Casi paradójicamente, entre marzo y junio, mientras la pandemia azotaba fuertemente la sociedad uruguaya con altísimos números de contagios y muertes (y en medio de fuertes polémicas con la oposición y con una parte importante de la comunidad científica que demandaba mayores restricciones), el presidente recuperaba parcialmente niveles de aprobación, y terminaba el primer semestre solo un poco por debajo del año anterior".

"La tercera fase se inicia en julio, registrando una caída en la aprobación y un incremento de la desaprobación. Estas variaciones se dieron en el marco del anuncio de aumentos en el precio de los combustibles, medida que parece haber impactado de forma significativa en los juicios sobre el presidente. A partir de esta caída en julio, los juicios entraron en una nueva fase de relativa estabilidad, con niveles de aprobación en el entorno del 50%, y con desaprobación más cercana al 30%".

LOS MOTIVOS - Cuando se pregunta a los uruguayos que aprueban la gestión del presidente cuáles son las razones para sostener su juicio, indica el informe de Equipos, las referencias a la "Pandemia" aparecen con un lugar destacado, y esto ha sido una constante a lo largo de todo el período de gobierno. Como han mostrado otros estudios de Equipos Consultores, la gestión que el gobierno hizo de la pandemia ha tenido una valoración muy alta por parte de la población, incluso en los peores momentos desde el punto de vista sanitario.

Motivos de aprobación de la gestión del Presidente - En cambio, quienes desaprueban la gestión lo hacen por razones más diversas. La palabra "política" aparece muy grande, a veces asociada a la "política económica", a veces a lo "social", y a veces a la idea de que el presidente "hace política".

Motivos de la desaprobación de la gestión del Presidente - "Por tanto, el principal atributo positivo del gobierno está asociado al manejo pandémico, y los principales fundamentos de las críticas tienen que ver con la economía, lo social, y algunos aspectos de la dinámica política propiamente dichos", concluye la consultora.