Las selfies y los smartphones al sol ponen en riesgo los ojos, informaron oftalmólogos italianos, que alertaron por posibles daños permanentes.

Mirar directamente al sol, incluso durante unos segundos, en busca del encuadre perfecto para tomar un selfie puede crear un daño, incluso irreversible, a la retina como cuando se observa un eclipse solar sin gafas específicas.

El daño a la retina también puede ser causado por el uso prolongado de teléfonos inteligentes y tabletas al sol: la pantalla, de hecho, actúa como una superficie reflectante dirigiendo los rayos solares a los ojos donde pueden producir un efecto degenerativo.

Así lo señalan los expertos de la Sociedad Italiana de Ciencias Oftalmológicas (SISO), reunidos en Roma para el segundo congreso nacional.

Los casos de daños en los ojos relacionados con el uso excesivo de tabletas o teléfonos inteligentes bajo una intensa luz solar se describen en varios estudios.

Recientemente en el Journal of Medical Case Reports se presentó el caso de un hombre de 30 años que sufrió daños permanentes en la retina después de pasar tres horas leyendo en la tableta durante un viaje a la montaña.

Lo mismo le había sucedido a una joven de 20 años.

“Son claros ejemplos de maculopatía solar, una condición determinada por la absorción por la retina y el epitelio pigmentado de una alta energía radiante”, explicó Scipione Rossi, director de Oftalmología del Hospital San Carlo de Nancy de Roma y secretario tesorero de SISO.

“En los casos más graves, las células nerviosas en pocos días pueden formar un scotoma, una mancha negra en el centro del ojo. La lesión puede ser permanente y causar una reducción irreversible de la visión central”, añadió el experto.

“Por eso es conveniente evitar los selfies bajo el sol sin protecciones específicas porque las gafas de sol no son suficientes para filtrar adecuadamente la radiación luminosa”, agregó Rossi.