El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha ordenado a sus generales armar a "campesinos y pescadores" para sumarse a la defensa de la llamada "revolución bolivariana", al paso que recalcó que el chavismo nunca dejará el poder.
"Juro que la oligarquía no volverá y que la victoria nos pertenece por siempre", dijo Maduro en un acto político en el palacio de gobierno de Miraflores, a donde llegó una marcha de seguidores organizada por el Partido Socialista Unido de Venezuela para celebrar una batalla histórica de la llamada Guerra Federal.
"Los tiempos de la traición no volverán, la oligarquía no volverá. Hoy, día de Santa Inés, juro que la victoria pertenecerá por siempre, es nuestra", proclamó Maduro en su discurso.
"Los imperialistas y los fascistas (como llama a la los opositores) no podrán con el pueblo jamás y si vienen por las malas, los fascistas se arrepentirán", aseveró.
Ordenó reforzar el cuerpo de milicias, dentro de lo que el chavismo califica como un sistema "popular, militar y popular".
"Quiero dar un paso más allá, mayor general, comandante de la Milicia Nacional Bolivariana. La milicia debe avanzar mucho más allá en la creación de la milicia nacional campesina, de pescadores y cuerpos combatientes armados", proclamó.
La marcha reunió a campesinos trasladados desde el interior del país, ataviados con sombreros de paja. El propio Maduro vistió el uniforme de las Milicias, un cuerpo de enrolados civiles que depende directamente de la Presidencia.
"La victoria es nuestra y el próximo 10 de enero de 2025 saldremos a las calles por millones a jurar por Venezuela, por la independencia, por la Patria Bolivariana, y el 10 de enero y los años por venir serán años de paz, de prosperidad, de soberanía e independencia plena", proclamó Maduro.
Su elección para un tercer período que terminará en 2031 es cuestionada por la oposición y varios países porque el oficialista Consejo Nacional Electoral (CNE) anunció su victoria en la elección del 28 de julio sin mostrar pruebas, como los resultados desagregados por estados y municipios y las actas de escrutinios.
La oposición denuncia un fraude masivo y ninguna democracia de corte occidental ha reconocido todavía esa reelección.
