El Fondo Monetario Internacional (FMI) elevó a 4,1% el pronóstico de crecimiento de la economía en Latinoamérica para este año y aunque advirtió del aumento exponencial de las economías de varias naciones de la región, no dejó de recordar las graves heridas sociales que causó la pandemia del Covid-19.

En octubre del año pasado, el FMI pronosticó un crecimiento regional del 3,6% para el 2021, pero hoy elevó esas posibilidades dado el comportamiento de varias economías locales, la llegada de las vacunas, la mejoría en las "perspectivas de crecimiento" en Estados Unidos y el incremento de los precios internacionales de varias materias primas.

Sin embargo, para Alejandro Werner, director del departamento del hemisferio occidental del FMI, y su grupo de análisis, la región solo recuperará su dinámica económica, tal como venía operando antes del arribo del coronavirus, a partir de 2023. "No obstante, la plena recuperación está aún muy distante.

Según el pronóstico, el producto de la región retornará a los niveles previos a la pandemia apenas en 2023, y el PIB per cápita lo hará en 2025, es decir, más tarde que otras regiones del mundo", precisó el análisis hecho por Werner y su equipo en un informe titulado: "Un camino sinuoso hacia la recuperación en América Latina y el Caribe".

El Fondo puso en perspectiva la realidad regional al recordar que varias naciones lograron recuperar parte de sus desvencijadas economías a finales del año anterior, tras superar el primer pico de la enfermedad, pero todo volvió a quedar en entredicho con el arribo de la segunda ola de la pandemia y la orden de varios gobiernos de volver al encierro y a las restricciones cuyos efectos aún están por verse.

"Los costos sociales y humanos de la pandemia han sido enormes, y hacen que se cierna un gran sombra este pronóstico.

Se estima que más de 17 millones de personas han entrado en una situación de pobreza", recordó el informe, que volvió poner el foco sobre uno de los peores males que ha causado la pandemia: el desempleo.

En su pronóstico, el FMI intuyó un crecimiento de las economías de Argentina, Brasil, México, Chile, Colombia y Perú, pero no fue tan entusiasta con varias naciones del Caribe que dependen de los ingresos que les genera el turismo, uno de los sectores más golpeados por la pandemia a nivel global.

Las proyecciones de crecimiento para este año son para Argentina del 4,5%, para Brasil del 3,6%, Chile el 5,8%, Colombia 4,6%, México 4,3% y Perú con un extraordinario 9,0%.

En general, las previsiones del Fondo para Sudamérica son del 4,1%, mientras que para Centroamérica y el Caribe del 3,5%.

Finalmente, el informe del FMI aseguró que pese a las "incertidumbres" los países de la región están obligados a garantizar los recursos necesarios para enfrentar la crisis sanitaria, lo que incluye vacunas y pruebas, además de la obligación de mantener el apoyo a los sectores más vulnerables, y recordó que retirar el "apoyo fiscal demasiado pronto pondría en peligro estos objetivos", entre otras posibilidades.