América Latina pasó la dramática línea de un millón y medio de muertes por Covid-19, mientras que las víctimas mortales solo en Brasil ya son más de 600 mil, lo que lo convierte en el segundo país en términos de fallecimientos después de Estados Unidos.
El continente alcanzó los 45 millones de casos totales y solo el 37% de la población cuenta con dos dosis de la vacuna: más o menos la mitad del promedio de las naciones más industrializadas del mundo, reportó la Organización Mundial de la Salud (OMS). En este último aspecto, Chile y Uruguay superaron el 70% de los vacunados mientras que, en el extremo opuesto, en una decena de países, entre ellos Venezuela, Guatemala y Honduras, el porcentaje es del 25% o menos.
En el medio de la tabla se encuentran Argentina, Ecuador y Panamá, donde la población con total protección alcanza el 50% o un poco más.
El número de muertes ahora es impulsado principalmente por Perú, que tiene la mortalidad más alta del continente, y Venezuela.
De hecho, Venezuela llegó a un promedio semanal de 10.000 muertes, impulsadas por grandes concentraciones de multitudes y una variante Delta que funciona sin obstáculos, obstruyendo hospitales y clínicas y dejando a muchas personas enfermas sin tratamiento.
En Brasil, la situación solo mejoró recientemente: el sábado se superó el umbral de 600.425 muertes con 615 en 24 horas, un 80% menos que el promedio de muertes diarias del pasado mes de abril -más de 3.000 al día-.
La mejora se debe en gran parte a un número promedio de personas vacunadas con al menos una dosis que ahora es de alrededor del 70%, superior a Estados Unidos, donde el 65% recibió una dosis (el 56% tenía dos).
De hecho, a pesar del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, los brasileños se inclinan mayoritariamente a inmunizarse: "La tasa de rechazo de vacunas en Brasil es realmente baja, y esto despierta los celos de otros países, como Estados Unidos", explicó Alexandre Naime Barbosa, jefe de Epidemiología.
Departamento de la Universidad Estatal de San Pablo.
Pero el total de contagios en una población de 237 millones de personas superó los 45 millones: una situación cuya culpa se suele atribuir al presidente negacionista, quien obstaculizó las medidas restrictivas con el argumento de deprimir la economía.
Una actitud que en el país más grande y poblado de América Latina provocó grandes manifestaciones de protesta.
Según algunos expertos, los trágicos y devastadores efectos del coronavirus en el pasado, provocados principalmente por la variante Gamma, aún podrían haber mitigado los efectos del Delta, que actualmente hace estragos en el mundo.
"El enorme costo en vidas humanas con la mutación Gamma produjo como resultado que una gran parte de la población era inmune cuando la delta se extendió", según el virólogo Fernando Spilki de la Universidad Feevale del Rio Grande do Sul.