MONTEVIDEO (Uypress)- Los médicos del interior del país aseguran que los equipos de salud atraviesan una “gravísima situación” por la “circulación descontrolada” del coronavirus y que intentan tener diálogo con las autoridades desde hace dos semanas.

Como ya lo había manifestado el Sindicato Médico, la Federación Médica del Interior (Femi) expresó su preocupación por la "gravísima situación que atraviesan los equipos de salud de todo el país como consecuencia de la circulación descontrolada del covid-19".

En una declaración de su comité ejecutivo, la Femi respalda al Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) y a su coordinador, Rafael Radi, quien, aseguran, "expresó de manera clara y contundente que si bien los desafíos son constantes y de responsabilidad compartida entre la actitud de las personas y las decisiones de las autoridades, las medidas adoptadas no han sido suficientes", en referencia a la entrevista que dio Radi al semanario Búsqueda.

"Confiamos en la ciencia, en la medicina y en la vacunación como salida a esta situación, pero también nos vemos en la obligación de alertar", señalan, y afirman que la "sobrecarga sostenida a lo largo del tiempo hará que el fusible reviente. Y el fusible es el sistema de salud". "El inminente escenario de aumento exponencial de los contagios nos preocupa tanto como la naturalización de las muertes diarias".

Señalan que si bien la vacunación puede comenzar a incidir en la disminución de los casos graves y en las muertes, "el aumento diario de contagiados y de casos activos sobrecargará aún más el primer y segundo nivel de atención. Por eso sigue siendo fundamental reducir los contagios".

Advierten que el Covid-19 ha desplazado a otros pacientes por las situaciones de saturación que se dan, por ejemplo, "en las puertas de emergencia en el norte del país": "Nos preocupa que en nuestro país puedan convivir realidades paralelas tan opuestas, como la que a diario viven nuestros colegas y compañeros y la que por otro lado se percibe en la población, que recibe a diario mensajes de 'situación bajo control' a los que se les suman flexibilizaciones de reducción a la movilidad".

Aseguran que les preocupa "sobremanera percibir un cambio que no es bueno para nadie: sentimos que las autoridades han dejado de escuchar. Desoyeron al GACH, pero también hay un cambio de postura frente a los médicos, las sociedades científicas y los gremios de la salud".